martes, 13 de septiembre de 2011

Ibaguereños contentos con la ciudad, pero no con la salud

Por: Hugo Neira Sánnchez
La encuesta “Ibagué, como vamos”  revela orgullo por la ciudad, también un déficit del cubrimiento del servicio de agua en atención de salud.
Los ibaguereños están satisfechos con su ciudad, pe­ro les preocupan las fallas en  el servicio de agua y los pro­blemas que aquejan a la atención en sa­lud. Así lo" revela la encuesta de percepción ciudadana 'Ibagué, cómo vamos', que efec­tuó Ipsos Napoleón Franco en junio y julio, entre 1.000 hom­bres y mujeres mayores que habitan en las 13 comunas urbanas de la ciudad.
El programa es producto de una alianza interinstitucio­nal entre la Universidad de Ibagué, la Fundación Corona, las cámaras de comercio de Ibagué y Bogotá, la Casa Edi­torial EL TIEMPO y El Nuevo Día, Según la encuesta, se incre­mentó el orgullo por la ciu­dad, que pasó del 72 por ciento el año pasado al 76 por ciento. También mejoró la satisfac­ción de vivir en esta ciudad, que el año pasado era del 70 por ciento y subió al 75 por ciento. Sin embargo, a la salud no le fue bien en la medición. El 60 por ciento considera que en Ibagué no está garanti­zado el derecho a la salud, ci­fra que subió considerable­mente, pues el año pasado el porcentaje era del 48 por ciento.
También se quejaron de los tiempos de atención. Además, un 28 por ciento de los entrevistados dijo que luego de pe­dir una cita pasaban entre 1 y 5 días para atenderlos, y un 24 portento afirmó que lo aten­dían luego de entre 6 y 10 días.
La satisfacción con el servi­cio de acueducto bajó un poco, pues del 54 por ciento, el año pasado, se redujo al 51 por ciento, pero creció la del servi­cio de energía, al pasar del 74 al 82 por ciento.
En educación, los resulta­dos son positivos. En una cali­ficación de 1 a 5, este sector re­cibió un 4 (él año pasado era de3, 8).
Caso contrario se observó en las vías, donde el 44 por ciento de los entrevistados se siente insatisfecho con el esta­do de las vías.
En gestión pública, la ima­gen favorable del alcalde, Je­sús María Botero, bajó del 62 al 54 por ciento, mientras su gestión fue calificada como ma­la por el 33 por ciento y buena, por él 32 por ciento. "Hoy la ciudad es otra, la gente se siente bien, el opti­mismo es alto y, aunque no so­mos perfectos, en algunas co­sas nos fue mal pero en otras bien; estoy satisfecho porque, con un presupuesto exiguo de 300 mil millones de pesos, Ibagué salió del anonimato, tiene una hoja de ruta, un camino trazado para superar las difi­cultades y mejorar aún más los sectores en los que nos ha ido bien", dijo el Alcalde.
Agregó que "en agua, las di­ficultades deben mejorar lue­go que el Gobierno Nacional nos aprobó un proyecto de 56 mil millones de pesos para el acueducto complementario". Igualmente, la percepción de inseguridad ciudadana, que estaba en el 26 por ciento, subió al 32 por ciento.
En medio ambiente, la ciu­dad considera que los 3 pro­blemas a los que se les debe­ría prestar mayor atención son la contaminación del río Cómbeima, la contamina­ción de las fuentes hídricas internas y el cuidado de fuen­tes de agua que surten el acueducto.
En materia de desarrollo económico, los resultados muestran que las cosas vienen mejorando, pues se redujo la percepción de pobreza, al pa­sar del 32 al 24 por ciento este año.

PERSONAS, DE LAS MIL QUE SE ENCUESTARON

Consideraron que en Ibagué no está garantizado el derecho a la salud y se quejaron de que el tiempo para recibir atención médica puede llegar a ser de 10 días.