domingo, 27 de mayo de 2012


Biocombustibles VS contaminación, cual es la verdad?
Por Hugo Neira Sanchez.

Hace unos días con gran despliegue del periódico “El Tiempo”, con una página entera  mostro al pueblo colombiano las bondades del biocombustible usado en Colombia, producido en base a la caña de azúcar.  Las comparaciones que se hicieron dejaron a muchos  satisfechos las cuales fueron: Biodiesel Colombiano 83%, Colza Europea 15%, Soya Estados Unidos 44%, Palma malasia 35%, Soya Brasil 19%, Etanol colombiano 74%, Etanol de caña de azúcar Brasil 64%, Etanol de Remolacha Europa 53%, Etanol de maíz Estados Unidos 10%, Etanol de trigo Unión Europea 7%. Realmente estos publicistas nos creyeron caídos del “zarzo” pues  las comparaciones se hacían con respecto al cultivo, no al efecto a lo que  realmente  se  produce en Colombia el biocombustible y, la utilización  para rebajar la contaminación causada por la gasolina nuestra, producida por un petróleo “pesado”, producido como  el de Venezuela,  bastante contaminante. Muy bien por esto, pero en nuestro menú alimenticio no tenemos como plato especial el biocombustible.  
Realmente el efecto del biocombustible sobre medio ambiente es un solo 3%  del total de emisiones colombianas de C02 en 2008, o al 8°/ de las emisiones causadas por el sector de transporte en Colombia (UNEP2010), más un 8% por su transporte, lo que representa un 16% aproximado en dinero, el cual  es incluido en la gasolina más cara del mundo.
El costo de nuestra gasolina incluyendo el biocombustible tiene numerosos costos adicionales, parece una “vaca lechera”: Ingreso al Productor de la Gasolina Motor Corriente, Ingreso al Productor del Alcohol Carburante (8%), Ingreso al productor de la Gasolina Motor Corriente Oxigenada, IVA, Impuesto Global , Tarifa de Marcación, Tarifa de Transporte por poliductos de la Gasolina Motor Corriente, Tarifa de Transporte del Alcohol Carburante, Margen plan de continuidad abastecimiento, Sobretasa, Margen al distribuidor mayorista, Margen del distribuidor minorista, Pérdida por evaporación, Transporte de la planta de abastecimiento mayorista a estación.
No se entiende que un país productor de petróleo, como el nuestro, se embarque en producir biocombustible, usando sus mejores tierras que se deben dedicar a cultivar alimentos, pues  poco a poco van escaseando las tierras laborables y, a su vez el alimento, como el maíz, que lo compramos a los Estados Unidos, subsidiado y transgénico, que hasta ahora nadie conoce la consecuencias que van a tener estas cosechas  en la salud de los usuario, pero si ha visto en las plagas que se han combatido, apareciendo  “bichos” en forma deforme nunca vistos jamás.
La producción de biocombustible lo tiene que hacer el Brasil que no tiene petróleo, pero nosotros que nos gusta imitar y,  alguien tiene el dinero,  las influencias políticas, nos embarcaron en bajar el calentamiento global con el biocombustible, como si fuéramos únicos en el mundo. El calentamiento tiene dos factores el uso de combustibles fósiles y,  por otra parte un periodo geofísico que ha tenido varias veces la tierra en su camino por el universo después del Big Bang.
Mientras tratamos disminuir el calentamiento con el biocombustible, no nos ha dicho que estamos dañando con esto la capa de ozono, pues es exceso de ozono en la Costa Sur de California, por uso de 10% de etanol en combustible, es dos veces mayor que en últimos tres años, mientras que la concentración máxima de ozono subió a un 22%. Este incremento en ozono se correlacionó con un incremento en las emisiones de óxido de nitrógeno y compuestos orgánicos volátiles, que no fueron registrados por la Agencia de Protección Ambiental de EE.UU. (EPA).  
El EPA aprobó el etanol en gasolina usando un modelo erróneo para sus pruebas, que no toma en cuenta el hecho que el etanol tiende a producir más óxidos de nitrógeno, que suele escaparse de los tubos sellados del sistema de combustible de los vehículos y que reduce la eficiencia, por lo tanto, incrementa emisiones de gases. Se hace necesario un llamado para que “no se permita la expansión del uso” de etanol en la gasolina de los EE.UU. Y en Colombia seguimos gastando el exiguo presupuesto de investigación en estas cacareadas novedades del etanol, la biomasa y demás pendejadas
El acetaldehído, producto de la combustión de etanol esta listado como contaminante Toxico del Aire en California basado en evidencia de sus propiedades cancerígenas y PAN dice que este químico es “genotóxico (causa daño genético) y produce problemas respiratorios e irritante a los ojos, también puede producir daños pulmonares”. El NRDC señaló que incrementando el uso de etanol en el combustible podría llevar a un aumento de la exposición a etanol vía inhalación, que podría resultar en una variedad de tóxicos asociados con la ingestión de etanol. También alertaron sobre las emisiones de nitratos óxidos y compuestos inflamables orgánicos que producen ozono
O sea que tristemente nos han metido gato por liebre, pero como el pueblo colombiano es lo mas pasivo para protestar y, sus dirigentes en el Congreso han demostrado que la mayoría legislan para ellos mismos y, no para quien los nombraron, realmente no conocemos que tan  caro nos va a salir este ensayo absurdo con investigaciones amañadas y, se pone en duda los estudios realizados por importantes centros de investigación del país, que investigan las causas y no lo efectos, enriqueciendo mas y mas a uno de nuestros “cacaos”, quien debe saber que el camino al infierno está sembrado de buenas intenciones.
Que preferimos un poco de calor o morir achicharrados, o con canceres de la piel al faltar la capa de Ozono.  
Lo que necesita Colombia es un estudio de costo-beneficio comparando las tierras no cultivadas para alimento contra los reales beneficios del biocombustible, su producción que no sale en estos estudios y, el efecto de la contaminación incluyendo el Ozono, diferente a lo que nos están manifestando  en costosas publicaciones es otra de las mentiras que nos bombardean diariamente. El papel puede con todo!