EL SENADOR MAURICIO JARAMILLO SE DESPERTÓ DE SU LETARGO
El congresista Jaramillo se ha caracterizado por tener un bajo perfil durante los muchos años que ha estado en el Congreso, compitiendo en estadía en su curul, con otro Congresista elegido por el Cauca, el senador Aurelio Iragorri Hormaza. Sin escándalo alguno, trabajando como una hormiguita, visita constantemente al Tolima, para verificar la fidelidades de sus votantes quienes ciegamente “votan, votan, y votan por él”.
No hemos oído, ni conocemos su opinión sobre los grandes problemas de los servicios públicos del Tolima, especialmente las del sector eléctrico, con la venta de sus activos, a las personas menos apropiadas para hacerlo, además de su entrega por un “plato de lentejas”, donde su familiar Germán Hoyos Jaramillo durante más de 15 años llevo a la Electrificadora a su cúspide, en su largo periodo gerencial, donde colocó con orgullo como la segunda electrificadora de importancia cuando el Icel, organismo Nacional agrupaba todas las electrificadoras del País, incluyendo a San Andrés.
Es tanto su anonimato, que supimos hace unos día, en forma tardía que fue nombrado como secretario del partido Liberal, cuando el columnista del “Tiempo” Mauricio Vargas contó, que acababa de renunciar a este honor, por la sencilla razón que el glorioso partido liberal no apoyo la marcha patriótica, de doña Piedad Córdoba.
De su morada de invierno como el oso, despertó de su letargo, con ideas sinceramente muy respetables de doña Piedad Córdoba, que no compaginan con la base ideológica del partido Liberal, quien siempre desde su nacimiento ha predicado los postulados que lo hicieron sobresalir en el siglo XIX, “ Libertad, Igualdad y Fraternidad” y, que tiene pocas afinidades del partido de doña Piedad, donde se busca el bienestar económico de muchos de nuestros compatriotas, cortando las libertades individuales, como lo hacen actualmente los Castros en Cuba y sigue este camino nuestro vecino Presidente de Venezuela; Chávez.
No comprendo como el partido liberal ha perdido su rumbo; pues por una parte ha predicado el Neoliberalismo, “el capitalismo Salvaje”, donde el Estado tiene que vender todas sus propiedades y ser un simple arbitro, sin otra intervención que dirigir, esto ha tenido serias repercusiones en Europa, con resultados adversos para todos, o al extremo izquierdista con un partido con tintes comunistas de aplastamiento brutal de las libertades individuales, como las predica con manto de “oveja” el partido de doña Piedad Córdova. Las ideas de doña Piedad Córdoba son muy respetables, pero no compaginan con los ideales liberales.
Lo más extraño con el caso del senador Jaramillo, es que su proceder va en contravía, del comportamiento general de los individuos; de joven revolucionario; “tira piedras” a ideas un poco conservadoras, cuando la edad va disminuyendo los bríos inconformes y va comprendiendo que las cosas no son como se “pintan”, pero el senador Jaramillo hace lo contrario.
El partido liberal deben tener “fraternidad” con sus militantes, buscar la justicia social con libertades, no aplastando sus ideales con prohibir la libertad de prensa, la propiedad, etc., creando burocracia de sus “áulicos” militantes hacen sociedades dictatoriales con pretextos sociales terminando en burocracias familiares, como los Castro en Cuba, que nunca en su vida han tenido que hacer fila para proveerse de alimentos, ni una libreta que se los limite. No se olvide que Mao en China trato de evitar estas roscas o burocracias estatales, fomentando la revolución cultural, causando un retraso económico y científico de muchos años de su revolución.
Mientras esperamos que el senador Jaramillo no solo se haya despertado de su letargo político sino de su letargo regional, tratando de buscar la próxima gobernación, no vaya recibir un rechazo en las votaciones, porque muchos no lo conocen sino de nombre, especialmente por su hermano. Si sus acciones regionales son las mismas que las que ha desempeñado en el Senado, es mejor para el bien del Tolima se quede quietico y, pase a la historia como muchos congresistas Tolimenses que por su región no han hecho ni fu ni fa,
